Taste all Those

El próx­i­mo fin de sem­ana del 2 y 3 de Abril de este año 2016, se cel­e­brará la primera edi­ción de Taste All Those en el park­ing de la Uni­ver­si­tat de Barcelona, y que recoge todo el tra­ba­jo ante­ri­or de 3 edi­ciones pasadas de Food Mar­ket real­iza­do por los mis­mos orga­ni­zadores, All Those, ocu­pan­do una vez más el mis­mo recin­to universitario.

El obje­ti­vo claro de esta prop­ues­ta es la de acer­car a los pro­duc­tores de mate­rias pri­mas de tem­po­ra­da al con­sum­i­dor final, tal como ocurre por otras lat­i­tudes más al norte de nue­stro país como es el caso del londi­nense Maryle­bone Farmer´s Mar­ket, siem­pre con la premisa de cal­i­dad, inter­calán­dose los elab­o­radores ecológi­cos con los biod­inámi­cos, tan­to de fru­tas, ver­duras, mer­me­ladas, que­sos, embu­ti­dos, cervezas o vinos nat­u­rales, entre otros. Una man­era difer­ente de poder acer­car estos pequeños arte­sanos que por pre­cio no pueden com­pe­tir con los canales habit­uales y que ofre­cen artícu­los con per­son­al­i­dad, con sabor de antes, con carác­ter a pueblo, a hecho a con­cien­cia. Todo esto estará engloba­do en Farm­ers Mar­ket. Será una gran opor­tu­nidad de hac­er la com­pra en domin­go en un ambi­ente fes­ti­vo y con bue­nas vibra­ciones musicales.

www.bloghedonista.com

Mer­me­ladas de “La madre de Miren”. Fotografía gen­tileza de All Those Food Market

Tam­bién los más pequeños de la casa ten­drán su rincón, en Mini All Those, para realizar man­u­al­i­dades vin­cu­ladas a la ali­mentación saludable.

No podía fal­tar la opción de Street Food rep­re­sen­ta­do por jóvenes chefs que se dis­tinguen por la mis­ma filosofía de usar pro­duc­tos de tem­po­ra­da, sostenible y de prox­im­i­dad. Entre ellos estarán: el bonaerense Esta­nis Caren­zo, del aplau­di­do Sud­esta­da sito en la madrileña calle gas­tronómi­ca de Pon­zano, y que aca­ba de abrir en la Ciu­dad Con­dal tres espa­cios den­tro del Hotel Casa Bonay: Ele­phant-Coco­drile-Mon­key, Têt y Lib­er­tine. Tam­bién estarán para ale­grar nues­tras papi­las gus­ta­ti­vas Tan­door, Casa Xica o Car­avelle entre otros restauradores.

www.bloghedonista.com

Fotografía gen­tileza de All Those Food Market

Durante este 2016, además de esta próx­i­ma edi­ción de pri­mav­era, se hará otra en octubre has­ta con­seguir que en el 2017 ten­ga repeti­ción men­su­al de tal man­era que forme parte de los hábitos ciu­dadanos y del paisaje urbano.

Días 2 y 3 de Abril de 2016 en horario de 11:30 a 20:30h. Park­ing de la Uni­ver­si­tat de Barcelona entra­da por la Gran Vía de les Corts Cata­lanes con la calle Balmes. Acce­so libre.

BSO Fast Car  de Jonas Blue ft. Dako­ta ver­sión feliz­mente recu­per­a­da del exi­toso tema de Tra­cy Chap­man pub­li­ca­do en 1988.

© 2016 José María Toro. Todos los dere­chos reservados

Vino para dos. Capítulo 18

www.bloghedonista.com

Fotografía de Noe­mi Martin

La vida me per­sigue para abrazarme.
Yo sal­go huyendo.
Vino por copas que huele a rabia. Tapas de penas con pan caliente.
La vida me apri­siona para quererme.

Male­ta sin can­da­do. No hay contraseña.
Espérame en mi muerte. Jazz en mis venas.
Funes­ta y cie­ga: cómeme sin pudores, bébe­me entera.

Guardan­do el pas­aporte, cier­ro la puerta.
Tu ros­tro me acom­paña por la escalera.
Yo voy dejan­do migas por si volviera. Quizás en otro tiempo.
Bus­caré tu son­risa en la car­retera. En las gotas de vino y en la nevera.

La vida me acor­rala en el aeropuerto.
En las pan­tallas grandes, en los rincones.
Las azafa­tas ríen. No entien­den nada.
Están velando a un muer­to. No les da pena.

Las alas se me rompen. Hia­to indeleble.
Temores, puñal­adas. Incertezas errantes.
Lágri­mas que no lloro.
Y en mis cenizas que­da el olor de tu cuerpo.

La vida me ator­men­ta mien­tras me quemo.
Ya no quedan reta­zos de lo que era.
Sólo un tro­zo de Ana, pequeño y triste
que deja estos dolores en su cuaderno.

BSO The End of A Love Affair de Bil­lie Holiday

© 2016 Noe­mi Mar­tin. Todos los dere­chos reservados

Qatar International Food Festival 2016

Del 22 y has­ta el próx­i­mo 28 de Mar­zo de 2016, Doha, la cap­i­tal de Catar,  con “C“según la grafía recomen­da­da en Ortografía de la lengua españo­la, o Qatar, la que usaré en este escrito, según la nomen­clatu­ra ofi­cial de la ONU, cel­e­bra la sép­ti­ma edi­ción del cer­ta­men gas­tronómi­co Qatar Inter­na­tion­al Food Fes­ti­val (QIFF) bajo el lema “Una fac­eta dis­tin­ta de la comi­da”.

Este pequeño esta­do árabe ubi­ca­do en el oeste de Asia y que ocu­pa la pequeña penín­su­la homón­i­ma, medi­ante su ofic­i­na de tur­is­mo, Qatar Tourism Author­i­ty, y la mejor aerolínea del mun­do, Qatar Air­ways, orga­ni­zan esta exposi­ción anu­al para mostrar la coci­na qatarí de la mano de sus mejores chefs locales, inter­na­cionales y de cocineros de Chi­na como país invi­ta­do. El obje­ti­vo es con­seguir que la cap­i­tal qatarí se con­vier­ta en un des­ti­no Pre­mi­um del tur­is­mo ocu­pan­do la gas­tronomía un lugar impor­tante en dicha oferta.

Activi­dades para todos los gus­tos como la cena a 45 met­ros de altura “Din­ner in The Sky” no apto para per­sonas con vér­ti­go y que con­siste en una degustación de los mis­mos platos  que se sir­ven en Busi­ness Class de Qatar Air­ways. “High tea by the Bay” deli­cioso ser­vi­cio de té en un esce­nario úni­co para com­par­tir con ami­gos. “A Taste of Qatar & Chi­na” lo mejor de ambas cul­turas gas­tronómi­cas. “Fine Cui­sine at the Park” en el cual los chefs de los hote­les de 5 estrel­las ofre­cerán degusta­ciones de sus platos más emblemáti­cos. Los “Food Trucks” tam­bién estarán pre­sentes en esta mues­tra. “Street Fare” ocu­pará el Paseo Marí­ti­mo de Doha con una ofer­ta gas­tronómi­ca que seguro sat­is­fac­erá a todos los gus­tos. Tam­bién la posi­bil­i­dad de vivir una increíble expe­ri­en­cia de com­er en los tradi­cionales bar­cos de madera qatarís, “Din­ner on a Dhow”, en la bahía de Doha mien­tras se dis­fru­ta de unas impagables e imperdi­bles vis­tas panorámi­cas del sky­line de la cap­i­tal al anochecer mien­tras se va apa­gan­do la luz del sol y comien­zan a ilu­mi­narse los edi­fi­cios. El “BBQ-Donut” que es una man­era difer­ente de dis­fru­tar de una bar­ba­coa en una mesa de restau­rante flotante. “The Mar­ket” ofre­cerá toda una selec­ción de pro­duc­tos gourmets. Y para los que se cuidan la opción más health­i­er en “Ever­green Organ­ics Café”.

Demostra­ciones de coci­na por pres­ti­giosos chefs locales e inter­na­cionals, activi­dades para los más pequeños con sus per­son­ajes favoritos de la tele­visión nacional y diver­sos entreten­imien­tos para toda la famil­ia, con final noc­turno de lla­ma­tivos fue­gos arti­fi­ciales cada jor­na­da for­marán parte del resto de even­tos en el QIFF 2016.

El exi­to de la pasa­da edi­ción ha ani­ma­do a los orga­ni­zadores a su ampliación de 5 a 7 días y a tres local­iza­ciones de excep­ción como es el Par­que del Museo de Arte Islámi­co (MIA), el Katara Cul­tur­al Vil­lage y The Pearl-Qatar.

www.bloghedonista.com

Mashkool con cordero. Coci­na­do, emplata­do y fotografi­a­do por Gem­ma Toro

Uno de los platos estrel­la de Qatar es el Mashkool con cordero y como trib­u­to a esta gas­tronomía os dejo la rec­eta de su preparación:

  • Se lava el arroz bas­mati y se deja reposar en agua durante una hora con una cuchara­da de sal.
  • La pieza de cordero se cor­ta en 8. Se lava bien y se hierve en 14 tazas de agua.
  • Reti­rar la espuma de la superficie.
  • Añadir al cordero la canela, el car­damo­mo, los clavos y la sal. Con­tin­uar la ebul­li­ción has­ta que el cordero esté prác­ti­ca­mente cocido.
  • Reti­rar el cordero del agua y hervir el arroz en el mis­mo agua.
  • Una vez coci­do el arroz hay que colarlo.
  • En una sartén grande se calien­ta aceite de oli­va vir­gen extra y se sofríen las cebollas.
  • Se le añade ajo, jen­gi­bre, pimien­to verde picante, el cordero y las espe­cias mez­clán­do­lo bien.
  • En otra cazuela se calien­ta media taza de agua y se le añade la cúr­cuma mol­i­da y el azafrán.
  • Pon­er una pequeña can­ti­dad de man­te­qui­l­la en el fon­do de la olla. Vert­er parte del arroz y espolvore­ar con la mez­cla ante­ri­or y vert­er­lo sobre el cordero.
  • Añadir el resto de arroz y espolvore­ar tam­bién con la mez­cla de agua y especias.
  • Incor­po­rar los tomates al arroz.
  • Pon­er el arroz en una cazuela tapa­da y horn­ear­lo durante media hora pre­ca­len­ta­do a 120ºC.
  • Emplatar el cordero y el arroz con imag­i­nación y a dis­fru­tar del plato.

© 2016 José María Toro. Todos los dere­chos reservados

Vino para dos. Capítulo 17

Fin de la actuación en Sausal­i­to. Jai se despi­de de los dueños del “Chico & Rita” y ponemos rum­bo al aparta­men­to. Es la una de la mañana cuan­do el taxi cruza de nue­vo el Gold­en Gate. Com­bustible en las arte­rias, lava calen­tan­do mi alma. Es lo que tiene la músi­ca. El can­san­cio se ha esfu­ma­do. Adiós jet lag.

Mien­tras atrav­es­amos la ciu­dad, pien­so en las cosas increíbles que han ocur­ri­do en las últi­mas vein­tic­u­a­tro horas. Puro real­is­mo mági­co. Impro­visan­do con cada inspiración, como en un concier­to de jazz. La lla­ma­da a Jai, el vue­lo de Croa­cia a San Fran­cis­co, mi encuen­tro con Julia, la cena japone­sa en el Kuro­sawa, sus pal­abras, mis lágri­mas, la rec­on­cil­iación de Jai y su her­mana Clau­dia… Después de todo esto, imag­i­no que los uni­cornios azules real­mente exis­ten. Tal vez el amor ver­dadero. Y las mujeres-tio­vi­vo como yo, que le dan vuelta a los sen­timien­tos cien mil veces.

Al lle­gar al dúplex en Mari­na, subi­mos las escaleras lenta­mente. El ascen­sor no fun­ciona. Yo voy delante y Jai me empu­ja mien­tras aprovecha para acari­cia­rme. Cuan­do la puer­ta se abre, vuelve el olor a vainil­la que llena la casa. Es el fan­tas­ma de Julia que me atraviesa, ¿el pasa­do que todo lo invade? ¿Estoy segu­ra de que no es el pre­sente o el futuro? A fin de cuen­tas, dos años después siguen casa­dos. Tal vez Jai esper­a­ba reen­con­trarse con ella algún día y solu­cionarlo todo. De repente, me per­ca­to de que han desa­pare­ci­do sus fotos del salón. Supon­go que él las ha quita­do para no inco­modarme, aunque no sé en qué momento.

Nos besamos son­rien­do entre los cojines del sil­lón rojo. En la coci­na. En el pasil­lo. Atrav­es­amos sin miedo las vías del tren que lle­van al dor­mi­to­rio. Pon­go a mi ami­go Chet Bak­er en el móvil y lo dejo sonan­do en la mesil­la, jun­to a la cama. Quiero que esté con nosotros esta noche, una vez más. Trío con­sen­ti­do. Tor­men­toso Chet, casi tan­to como yo.

Cuan­do Jai Ack­er­man se qui­ta la camisa y la deja sobre la sil­la, con­tem­p­lo de nue­vo sus pecas sobre los hom­bros: astros pequeños, hormi­gas, gra­nos de are­na de este a oeste… Sus bra­zos fuertes y suaves, su cin­tu­ra poéti­ca, sus pier­nas firmes. Mi vesti­do de seda cae sobre el par­qué y los tacones quedan a un lado mien­tras bail­am­os abraza­dos. La brisa del mar se cuela por la ven­tana y la luz de una faro­la ilu­mi­na su son­risa, noc­tilu­ca oceáni­ca. Después, dibu­ja suave­mente sobre mi espal­da. Como un mán­dala gigante, me col­orea con sus dedos tibios. Me can­ta al oído, me saborea, me bebe. Entre sor­bo y sor­bo, olvi­do que he deci­di­do mar­charme. Después, aparto de mis entrañas cansadas las pal­abras obsesi­vas de mi padre: “nun­ca eres lo sufi­cien­te­mente bue­na, Ani­ta. No tienes madera de ganado­ra, déjalo”.

www.bloghedonista.com

Fotografía de Noe­mi Martin.

Chet con­tinúa tocan­do en el altavoz de mi telé­fono. Lo oigo suave y lejano casi entre sueños, con el sabor bal­sámi­co de Jai tat­u­a­do en mis labios. De repente un men­saje en mi móvil, retum­ba en la mesil­la y rompe el hechizo. De man­era instin­ti­va, cojo el telé­fono y miro la pan­talla que nos enfo­ca direc­ta a los ojos: su vue­lo con des­ti­no a Madrid se retrasa has­ta las 17.00 horas. Yo sus­piro y Jai me pre­gun­ta sor­pren­di­do: ‑Ana, ¿qué es ese aviso?

Me que­do par­al­iza­da. No puedo con­tes­tar. He per­di­do trein­ta años de golpe y soy una niña al bor­de del abismo.

-¿Te vas, aho­ra?  Jai se incor­po­ra y enciende la luz. Me mira y me apuñala con tris­teza. Ter­cer gra­do asesino del hom­bre que amo.

-Déjame que te explique. Esta­ba confundida.

-No hay nada que explicar, Ana. Lár­gate ya. El avión te espera. No te entien­do. Te he dicho que te quiero. Te he habla­do de mis inse­guri­dades, de mis secre­tos. Y tú te vas. Te ríes de mí, como Julia. Eres igual.  Y yo no quiero más locas en mi vida.

Luego se lev­an­ta y se viste. No me mira.  Oigo un por­ta­zo que retum­ba en mis oídos.

Me sien­to desnu­da en la esquina de la cama. Jai no se merece una mujer como yo. Es demasi­a­do bueno para mí. Mi padre tenía razón.

Reco­jo mis cosas. No ten­go nada. Ni siquiera lágri­mas. Sue­na “Every time we say goodbye”.

Adiós, Jai.

BSO:  Every Time We Say Good­bye por Chet Baker

© 2016 Noe­mi Mar­tin. Todos los dere­chos reservados

Pasaporte a la infancia

Si pudiera regre­sar a mi lugar favorito con bil­lete de ida y vuelta, via­jaría direc­ta a mi infan­cia. Sin pen­sárme­lo dos veces.

Me imag­i­no preparan­do la male­ta hacia mis siete años y son­río. Equipa­je de mano y una mochi­la de Snoopy vacía de desen­gaños.  Mi Bar­bie,  los libros del Bar­co de Vapor, una caja de cray­ones enorme, mi oso amoroso y un pequeño pony con el que recor­rer el mun­do. Vien­to a favor. ¡Ups! De repente cai­go en la cuen­ta de que con tan­tos libros y juguetes no que­da espa­cio para mis vesti­dos… Pero, ¿quién los nece­si­ta tenien­do ami­gos y cara­coles? Camise­ta, pan­talón cor­to y san­dalias rojas. Lista para la acción: pisci­na, patines y heri­das en las rodillas.

Dis­eñar el recor­ri­do durante los días que pasaré fondea­da en mi niñez resul­ta fácil. El mapa azul cielo incluye como lugares desta­ca­dos el bar­rio y el cole­gio. Tam­bién debo guardar en mi bol­sil­lo un plano detal­la­do del bar­ran­co jun­to a la casa de mis abue­los: imposi­ble pasar por alto un paraí­so lleno de plan­tas, char­cos y cuevas donde escon­der­se durante horas sin que papá te encuen­tre. Para los últi­mos días, cuan­do esté un poco cansa­da, lle­varé mar­ca­do el camino a la playa y al mer­ca­do donde están las jaulas de pol­li­tos y cone­jos. Tam­poco puedo olvi­darme de delin­ear la ruta para pasear con Blacky y sacar a mi cobaya sobre el hom­bro. Es mi par­tic­u­lar loro multicolor.

Una vez traza­dos los “lugares imperdi­bles”, es pre­ciso plan­i­ficar el tema “espec­tácu­los var­ios”. No es com­pli­ca­do: dos canales de tele­visión y un tran­sis­tor a pilas. Y cuida­do por la noche con las pelis de dos rom­bos. Que no me vean detrás de la puer­ta. Los viernes, cita ine­ludi­ble con el “Un, dos, tres…Responda otra vez” y la Ruper­ta. Ver­a­no azul, Ulis­es 31, los paya­sos de la tele y un capí­tu­lo de Dinastía jun­to a mi madre com­ple­tan el plan­ning vaca­cional. Y como rec­om­pen­sa por las notas, jor­na­da de cine y golosi­nas. En cartel­era, “Indi­ana  Jones en bus­ca del Arca Per­di­da”. ¡Voy con mi her­mana mayor!

www.bloghedonista.com

Fotografía de Noe­mi Martin

Como en todo via­je que se pre­cie, la gas­tronomía es pieza clave. El menú de mis vaca­ciones será sen­cil­lo pero energéti­co. Las calorías no impor­tan cuan­do se tra­ta de jugar has­ta las tan­tas. Además el azú­car no esta­ba mal vista hace trein­ta años. Leche de cabra con cacao, biz­co­chos baña­dos en almíbar, tor­tilla de abuela Inés, natil­las y mucha fru­ta. Nada de pesca­do ni híga­do, por favor. Ah y ketchup para aderezar­lo todo. De postre: chu­pachups y chi­cle Bazooka (esti­ra y explota). Y para finalizar un cig­a­r­ri­to de choco­late. Fumar no es tan malo, ¿ver­dad?

El dinero durante la estancia no será prob­le­ma. Soy ahor­rado­ra. Ten­go una caja llena de bil­letes del Monop­o­li y la hucha has­ta arri­ba de mon­edas de vein­ticin­co pese­tas. La paga sem­anal da para mucho.

Para ter­mi­nar mi plan, pien­so en la ban­da sono­ra. Estoy emo­ciona­da. En el país de mi infan­cia, me recibe Miguel Ríos con su “Bien­venidos”. Es lo que sue­na en la radio del “escaraba­jo” amar­il­lo de mi padre camino del cole­gio. Tam­bién Pimpinela y Mocedades en medio del Mundi­al de Fút­bol y Naranjito.

Repa­so por últi­ma vez mi proyec­to de vaca­ciones. Creo que no me fal­ta nada. Con la imag­i­nación en el bol­sil­lo, pastil­las de goma para el jet-lag y los ojos car­ga­dos de inocen­cia, me subo en el dragón blan­co de “La His­to­ria Inter­minable ”. Voy camino de mis siete años. ¿Alguien se apunta?

BSO: The Nev­erEnd­ing Sto­ry de Limahl

© 2016 Noe­mi Mar­tin. Todos los dere­chos reservados

Vino para dos. Capítulo 16

Jai besa con dulzu­ra mis labios y oigo caer un ladrillo de mi mural­la. Luego lla­ma a un taxi que nos lle­va direc­to al 1085 de Mis­sion Street. Ha oscure­ci­do des­de que bajé a la calle y las luces de la ciu­dad gol­pean los cristales del coche. Me der­rum­bo sobre mis stilet­tos negros  pero quiero dis­fru­tar de mi primera y últi­ma noche en San Fran­cis­co. Como si mañana fuera a estrel­larme en el avión de regre­so a casa. Aho­ra me pre­gun­to si he hecho bien com­pran­do el bil­lete a Tener­ife. Soy un hám­ster dan­do vueltas en cír­cu­los. Una carpa roja en una pecera dora­da. Me ago­ta ser yo mis­ma y  escuchar mis inse­guri­dades. Y enci­ma, después de estar tocan­do la trompe­ta en la casa de Jai, vuel­ven a acosarme los pen­samien­tos sobre mi padre. Su necesi­dad de que siem­pre fuese la niña per­fec­ta me mar­t­i­riza y acom­ple­ja. Stop, stop, stop…Para, Ana.

El restau­rante Kuro­sawa está en una antigua acad­e­mia de idiomas. En la puer­ta de cristal nos recibe el chef que abraza a mi acom­pañante y me salu­da con ros­tro amable. Es un tipo curioso: un japonés altísi­mo vesti­do de samurái que, según me cuen­ta Jai,  dirige un pro­gra­ma de coci­na en la NBC y al que conoce des­de sus comien­zos. Después de entrar, cruzamos un pasil­lo estre­cho donde la gente cena sen­ta­da en pupitres negros ilu­mi­na­dos con velas y lleg­amos a una pequeña sali­ta apartada.

-Para ti el despa­cho del direc­tor, ami­go.  Te he echa­do de menos, le dice el japonés a Jai mien­tras nos aco­mo­da en una mesi­ta a ras del sue­lo. Luego enciende  una radio antigua donde sue­na Coltrane y prom­ete molestarnos sólo para traer el vino y el menú degustación.

Con una copa en la mano derecha  y los palil­los en la izquier­da, pasa­dos veinte min­u­tos, asalto a mi amer­i­cano insond­able. Ten­go las armas ade­cuadas. Un tar­tar de atún picante y unos makis de foie nos con­tem­plan expec­tantes. Él me está hablan­do entu­si­as­ma­do de las bode­gas de su padras­tro en Napa y yo le inter­rumpo con ojos de sashi­mi: crudos y fríos. -¿Tú me quieres?

www.bloghedonista.com

Fotografía de Noe­mi Martin.

Jai me mira sor­pren­di­do y deja el vino sobre la mesa. Sus­pi­ra. — ¿Te acuer­das de lo primero que te dije cuan­do nos conoci­mos, Ana? Yo me que­do calla­da. Ese día esta­ba tan nerviosa que no oí sus pal­abras. ‑Yo lo recuer­do per­fec­ta­mente,  añade: “Me he toma­do la lib­er­tad de pedir la cena. Después de catorce sem­anas mirán­dote a escon­di­das mien­tras comes y sueñas, creo que sé lo que te gus­ta”. Son­río nerviosa con su respues­ta y él coge mi mano. ‑Pues sí, Ana. Tú pens­abas que ibas a verme a mí y yo esper­a­ba cada viernes para encon­trarte en la dis­tan­cia, como un náufra­go divisan­do un faro entre la cal­i­ma. Y te observ­a­ba con tu copa como un cachor­ro inde­fen­so. Tan inde­fen­so como yo, Jai el valiente. Y, ¿sabes una cosa?: “Quería con­ver­tirme en que­so para ser devo­ra­do con avidez y desea­ba ser vino para deslizarme por tu boca. Y colarme en tu inte­ri­or y ver qué pens­abas y cómo sen­tías. Y tan­tos y…”

No puedo evi­tar­lo. Estoy tem­b­lan­do y lloro. Los suyos son mis pen­samien­tos cuan­do le observ­a­ba a través de la cristalera nue­stros viernes jun­to al Atlán­ti­co. Mis lágri­mas no son gotas  finas. Son cuar­zos sin labrar a la deri­va que caen estru­en­dosos sobre la mesa de bam­bú. Lloro de feli­ci­dad, de incredul­i­dad, de estu­pid­ez.  Lloro y Jai pone su copa bajo mis ojos, son­rien­do con los suyos: — “agua de llu­via, mal­vasía puro. Pues claro que te quiero”.

Cuan­do ter­mi­namos de cenar, nos des­ped­i­mos del “chef samurái”  y tomamos un taxi hacia Sausal­i­to, una población al otro lado del Gold­en Gate. Vamos a un concier­to de jazz en uno de los  locales donde solía actu­ar Clau­dia. Por el camino, Jai me susurra al oído que después de tan­to tiem­po se siente fuerte, que con­mi­go a su lado se atreve a todo. Que ya no tiene que aparentar lo que no es. Mien­tras él se con­fiesa sin reser­vas, yo me sien­to una men­tirosa patética.

La noche es pre­ciosa y el Puente parece un braza­lete de oro sobre la Bahía. Hace tiem­po que no veo una ima­gen tan boni­ta. El bar de Sausal­i­to está lleno pero podemos entrar sin prob­le­mas. Jai conoce a todo el mun­do y todos se sor­pren­den grata­mente al encon­trar­le de nue­vo en la ciu­dad. Le veo feliz.

Después de pasar por la bar­ra, nos sen­ta­mos jun­to al esce­nario. Hay dos tabu­retes libres para nosotros. Un grupo ver­siona “Sum­mer­time”. La voz de la can­tante se parece muchísi­mo a la de Sarah Vaugh­an y me emo­ciono. Jai me abraza. Sien­to su olor y sus manos fuertes cuidán­dome. Tal vez sea cier­to que me ama. Yo aún no le he dicho que mañana regre­so a Tener­ife porque, una vez más, sen­tí  que perdía  el con­trol de mi vida y tuve miedo. Vuel­vo a casa porque soy una estúp­i­da. Me voy porque sigo sin creer que un hom­bre como Jai pue­da estar enam­ora­do de mí y no quiero sufrir. Esta his­to­ria tiene que empezar o acabar ya.

BSO : Sum­mer­time por Sarah Vaughan

© 2016 Noe­mi Mar­tin. Todos los dere­chos reservados

3ª edición de la ruta de la tapa en L’Hospitalet de Llobregat

www.bloghedonista.com

Auto­bús de época de Cervezas Moritz. Fotografía de José María Toro

L’Hos­pi­talet de Llo­bre­gat guar­da bares y restau­rantes de gran cal­i­dad gas­tronómi­ca poco o nada cono­ci­dos. Es como si la per­ife­ria de Barcelona no existiera, como si se igno­rase y se le diese la espal­da a todo lo que no esté en el cen­tro de la Ciu­dad Con­dal (y que se repite inex­orable­mente en todas las grandes ciu­dades). Para salir de este ostracis­mo y lla­mar la aten­ción tan­to de los mass media como de las redes sociales, para con­vo­car a gas­trónomos de las ciu­dades limítro­fes y de otras lat­i­tudes de paso por la cap­i­tal de la Sagra­da Famil­ia, se ha impul­sa­do por ter­cer año con­sec­u­ti­vo des­de l’Asso­ciació  de Gas­tronomía i Tur­isme (AGT) y con el soporte del Ajun­ta­ment (Ayun­tamien­to) de l’Hos­pi­talet de Llo­bre­gat esta ruta de la tapa, por un lado para gener­ar un movimien­to económi­co de conocimien­to de nue­stros pro­pios veci­nos, y por otro lado como agi­ta­dor gas­tronómi­co para dinamizar la cre­ativi­dad de los restau­radores de esta ciu­dad de L’Hos­pi­talet.

www.bloghedonista.com

Tata­ki de salmón en This & That Co. Fotografía de José María Toro

La ofer­ta con­siste en degus­tar cualquier tipo de tapas pero se ha queri­do ced­er el pro­tag­o­nis­mo a los pro­duc­tos de prox­im­i­dad, de km.0, proce­dentes del cer­cano Parc Agrari  del Baix Llo­bre­gat y por ende de tem­po­ra­da como el calçot, la alca­chofa del Prat, ajos tier­nos, apio, col­iflor, escaro­la, espinacas, habas y puer­ro. Es una gran for­tu­na dispon­er de cam­pos agrí­co­las a esca­sos kilómet­ros de la gran ciu­dad, ter­renos que siguen ded­i­ca­dos al sec­tor pri­mario de la economía en pleno siglo XXI y que no han cedi­do a la pre­sión urbanís­ti­ca. De esos ter­renos se reco­gen por la mañana sus pro­duc­tos y esa mis­ma tarde estarán en una tien­da o bar dis­puestos a ser con­sum­i­dos. Además de la cer­canía, que ya es un fac­tor impor­tante, tam­bién lo es el poder degus­tar esta mate­ria pri­ma de cal­i­dad y de recono­ci­do prestigio.

www.bloghedonista.com

Vol­cán Pota Bla­va. Tapa de Km. 0 En Establi­ments Planes. Fotografía de José María Toro

Por parte de la AGT y para moti­var la cal­i­dad y la imag­i­nación ha pre­vis­to un pre­mio a la tapa más pop­u­lar y al mejor camarero. Los clientes tam­bién entrarán en un sor­teo para estim­u­lar la fidel­i­dad así como la mejor foto com­par­ti­da en Instagram.

Par­tic­i­pan 35 establec­imien­tos con un elen­co de 55 tapas difer­entes a degus­tar de los diver­sos bar­rios de l’Hos­pi que se han apun­ta­do a esta ini­cia­ti­va. Pre­cios tam­bién muy democráti­cos para que sea ase­quible a may­or can­ti­dad de per­sonas: Quin­to de Mor­tiz + tapa de la casa por 2,5 euros o Quin­to Moritz + tapa km.0 por 3,5 euros.

www.bloghedonista.com

Enfi­la­do de buti­far­ras con may­one­sa de calçots del Parc Agrari. Tapa km.0 en El Cóm. Fotografía de José María Toro

Aunque esta pro­mo­ción está disponible has­ta el próx­i­mo 13 de Mar­zo de 2016 las difer­entes crea­ciones se seguirán sirvien­do durante el resto del año for­man­do parte de la car­ta de los difer­entes establec­imien­tos adheri­dos a esta ini­cia­ti­va. Más infor­ma­ción de las tapas ofre­ci­das y de los bares y restau­rantes par­tic­i­pantes en esta ter­cera edi­ción en quin­to tapa

Las fotografías cor­re­spon­den a las 3 tapas degustadas:

La BSO tam­bién es km.0 del can­tante Anto­nio Oroz­co Devuelveme la vida

© 2016 José María Toro. Todos los dere­chos reservados

Mujeres hedonistas

No hay duda de que durante sig­los, el plac­er sen­so­r­i­al ha esta­do exclu­si­va­mente en manos mas­culi­nas. Sólo los hom­bres podían dis­fru­tar de la vida en sen­ti­do amplio.  Eran ellos los que llev­a­ban el jor­nal a casa y, por  tan­to, sólo a ellos esta­ba reser­va­do el des­can­so y el deleite. Las mujeres, mien­tras, esta­ban des­ti­nadas a ser madres y cuidar del hog­ar sin rechis­tar. Para bailar ya esta­ba el palo de la esco­ba. Y para for­t­ale­cer los bra­zos, el matamoscas.

Por suerte, al menos en lo que se con­sid­era “el primer mun­do”, las fémi­nas empezamos a poder gozar abier­ta­mente de las cosas bue­nas que nos ofrece el paso efímero por el plan­e­ta Tier­ra. Sin com­ple­jos. Sin cor­tapisas. Ya no es extraño ver a una mujer con una copa de vino en la mano o via­jan­do con su mochi­la al hom­bro por país­es lejanos. Tam­poco lla­man la aten­ción las escapadas de fin de sem­ana con ami­gas casadas o las sal­i­das has­ta el amanecer.

www.bloghedonista.com

Fotografía de Noe­mi Martin

Cuan­do pien­so en todo lo que hemos cam­i­na­do y todo lo que les que­da por recor­rer a muchas mujeres con­tem­poráneas a mí, me sien­to abso­lu­ta­mente afor­tu­na­da y agrade­ci­da. Tam­bién cai­go en la cuen­ta de que, por respeto a las per­sonas que han hecho que esto sea posi­ble, ten­go el com­pro­miso de inten­tar ser feliz. Cada día un poquito más.

Aunque siem­pre las ten­go pre­sente, creo que en jor­nadas como ésta es espe­cial­mente impor­tante acor­darnos de nues­tras madres y abue­las. Gra­cias a ellas y a su incon­formis­mo no sólo ten­emos hoy dere­chos bási­cos como el voto. Tam­bién nos pertenece el dere­cho y la mar­avil­losa obligación de cumplir nue­stros sueños, de estar sat­is­fe­chas con nues­tra ruta vital y de pen­sar más en noso­tras y nues­tra dicha.

¡El brindis de hoy va por todas! Gracias.

BSO Respect de Aretha Franklin

© 2016 Noe­mi Mar­tin. Todos los dere­chos reservados

El video de cómo preparar un buen Txuletón del Grupo Sagardi recibe más de un millón de visitas.

www.bloghedonista.com

Txule­tones a pun­to de asar en restau­rante 1881 per Sagar­di en Barcelona. Fotografía de José María Toro

Muchos son los que se enfrentan los fines de sem­ana a la par­ril­la de car­bón de enci­na de la bar­ba­coa casera para inten­tar emu­lar a los que dom­i­nan este tipo de coc­ción con poco o nulo éxi­to. Para que ya no hayan más dudas, el pres­i­dente del Grupo Sagar­di Iña­ki Lz. de Viñaspre expli­ca pedagógi­ca­mente en un video col­ga­do recien­te­mente en YouTube y en Face­book del Grupo Sagar­di, como con pocos pasos se puede asar un buen txuletón y sacar­le todo el sabor sin perder jugosi­dad. Fas­es de tan obvias que muchas veces olvi­damos por las prisas del día a día, o por desconocimien­to. A modo de ejem­p­lo expli­ca que hay que sacar la pieza de carne pre­vi­a­mente a un tiem­po pru­den­cial de la nev­era para que se atem­pere, cómo con­tro­lar los min­u­tos de su asa­do, cuán­do echar la sal y por últi­mo como emplatar­la. Todo un méto­do didác­ti­co que puede con­ver­tir este pla­to en algo mem­o­rable o que desis­ta­mos a volver­lo a inten­tar y nos vayamos cor­rien­do a alguno de los restau­rantes del Grupo Sagar­di y pedir uno para com­er­lo tan ricamente.

www.bloghedonista.com

Txuletón prepara­do en el restau­rante Sagar­di BCN Cen­tre del Grupo Sagar­di. Fotografía de José María Toro

Este video está cre­an­do furor en las redes sociales y conc­re­ta­mente en Face­book que lle­va más de 1.335.000 repro­duc­ciones, 6.168 “me gus­ta” y 22.941 veces com­par­tido en ape­nas una sem­ana des­de su pub­li­cación el pasa­do 29 de Febrero. Amén de otras redes con sim­i­lar repercusión.

Grupo Sagar­di nació en 1996 con la filosofía de ofre­cer pro­duc­tos de alta cal­i­dad. Con este leit­mo­tiv han alcan­za­do has­ta hoy ten­er 30 establec­imien­tos que avalan su más que mere­ci­da rep­utación y su man­era de hac­er las cosas.

Video en Face­book https://www.facebook.com/GrupoSAGARDI/videos/984660514957265/

Video YouTube https://youtu.be/EZcW3IAyaMg

© 2016 José María Toro. Todos los dere­chos reservados

Menú degustación de la trufa en Crowne Plaza Barcelona

La tuber melanospo­rum o tru­fa negra o tru­fa de Périg­ord des­de tiem­po inmem­o­rable ha sido obje­to de deseo. Se la cita en la Bib­lia donde se la definía como “man­zanas del amor”, y las difer­entes cul­turas egip­cias, grie­gas y romanas dis­fru­taron de sus aro­mas. Galeno le atribuyó propiedades afro­disi­a­cas y Bril­lat-Savarin en su bril­lante Filosofía del gus­to reafir­mó esta con­vic­ción pop­u­lar en la Med­itación VI, obvi­a­mente gas­tronómi­ca. Y así has­ta nue­stros tiem­pos cibernéti­cos actuales.

Los prin­ci­pales pro­duc­tores de tru­fas son Fran­cia, España e Italia. Den­tro de España las prin­ci­pales especies que cre­cen son la tru­fa de ver­a­no (Tuber aes­tivum vitt), tru­fa de otoño negra (Tuber bru­male) y la apre­ci­a­da tru­fa negra. Las may­ores zonas truferas nat­u­rales en nue­stro país se encuen­tran en El Maes­traz­go, entre las provin­cias de Castel­lón y Teru­el, cre­cien­do en ter­renos cal­i­zos per­me­ables, de tex­tu­ra fran­ca y con algo de pen­di­ente, jun­to a árboles trufer­os (prin­ci­pal­mente las enci­nas) ya que este apre­ci­a­do hon­go se for­ma en sim­bio­sis con ellos. En Catalun­ya se encuen­tran entre las estriba­ciones pirien­aicas y la cordillera costera catalana.

www.bloghedonista.com

Tostadas con difer­entes tipos de tru­fas. Crowne Plaza Barcelona. Fotografía de José María Toro

Este tesoro está escon­di­do a unos 20 cen­tímet­ros deba­jo de tier­ra. Los recolec­tores, aunque reconoz­can cier­tas pis­tas irrefuta­bles, final­mente nece­si­tan la ayu­da de per­ros adiestra­dos capaces de detec­tar sus incon­fundibles aro­mas. De la difi­cul­tad en su local­ización y su alta coti­zación en los mer­ca­dos gas­tronómi­cos le ha vali­do el sobrenom­bre de dia­mante negro.

www.bloghedonista.com

Tru­fi­ta de foie-gras y cro­cante con man­go. Tosta­da de foie con micro-mesclum, piñones y tru­fa. Crowne Plaza Barcelona. Fotografía de José María Toro

El “Menú degustación de la Tru­fa” del Hotel Crowne Plaza Barcelona nos acer­ca este man­jar, que es todo aro­ma en su momen­to jus­to de madu­ración, y que com­bi­na­do sabi­a­mente con otros ali­men­tos nos regala sen­sa­ciones nuevas. A car­go de Pau San­ta­maría, hijo del mal­o­gra­do y siem­pre recor­da­do chef San­ti San­ta­maría, se puede dis­fru­tar has­ta el próx­i­mo 24 de Mar­zo de 2016 en el restau­rante El Mall situ­a­do en el inte­ri­or de las insta­la­ciones del hotel.

Platos degus­ta­dos:

Aper­i­tivos de tru­fi­ta de foie-gras y cro­cante con man­go y sub­lime tosta­da de foie con micro-mesclum, piñones y tru­fa. Todo sober­bia­mente armo­niza­do con Aire de L’Ori­g­an Cava Brut Nature, con el fin de provo­car que las bur­bu­jas hagan salir los aro­mas de la tierra.

Entrante: Pata­ta nature, hue­vo poché y tru­fa con brou de gal­li­na. Acom­paña­do del mis­mo cava.

www.bloghedonista.com

Rol­li­tos de lengua­do con cre­ma de ostras tru­fadas y hor­tal­izas cru­jientes. Crowne Plaza Barcelona. Fotografía de José María Toro

Degustación de un ele­gante arroz cre­moso con calçots, ceci­na y lámi­nas de tru­fa melanospo­rum. Casa­do con una copa de Lágri­ma Rosa­do de Navar­ra.

Rol­li­tos de lengua­do con cre­ma de ostras tru­fadas y hor­tal­izas cru­jientes. Ennovi­a­do con una copa de Scala Dei, un Pri­o­rat elab­o­ra­do con uva gar­nacha.

www.bloghedonista.com

Brasea­do de solomil­lo con con­trastes y sal­sa Perig­or­di­na. Crowne Plaza Barcelona. Fotografía de José María Toro

Brasea­do de solomil­lo con con­trastes y sal­sa Perig­or­di­na y el camaleóni­co Scala Dei anterior.

www.bloghedonista.com

Chou Crum­ble y cre­ma de carame­lo. Crowne Plaza Barcelona. Fotografía de José María Toro

Espec­tac­u­lar postre Chou Crum­ble y cre­ma de carame­lo com­bi­na­do con Masía Estela Dolç Nat­ur­al Sol­era, de l’Empordà.

Crowne Plaza Barcelona Fira Cen­ter de Avda. Rius i Taulet, 1–3 de Barcelona 08004, está situ­a­do estratégi­ca­mente jun­to al recin­to fer­i­al de Fira de Barcelona, en la fal­da de la mon­taña de Mon­tjuïc, muy cer­ca del pop­u­lar bar­rio del Poble Sec y tam­bién del cen­tro de la ciudad.

Fuentes: “Enci­clo­pe­dia del Gourmet” de Juan Muñoz Ramos y “Fisi­ología del gus­to” de J.A. Brillat-Savarin

© 2016 José María Toro. Todos los dere­chos reservados

 

A %d blogueros les gusta esto: